martes, 23 de abril de 2013

Exposiciones


Exposiciones
Obras arquitectónicas de la Grecia Antigua


La arquitectura de la Antigua Grecia, como estudio y análisis en el proceso de formación acádemica, es un punto interesante de comparación como reflexión acerca de los principios ordenadores y la esencia de dicha arquitectura:
Belleza =geometría y proporción.

A través de las diferentes obras expuestas en clase pudimos recopilar las similitudes y diferencias, clasificar en órdenes, tipos de templo, y momento histórico los diferentes templos, gimnasios y teatros; construcciones que respondían directamente a las necesidades de las antiguas civilizaciones, siendo estos los primeros espacios pensados y construidos para el hombre, no desde la supervivencia sino desde su espacialidad relacionando la “humanidad” (como característica humana), teniendo en cuenta los aspectos físicos, la antropometría.

Entre estas cualidades vimos que la ubicación de los templos, deteniéndonos en este tipo de construcciones, hace referencia a la zona sagrada de la ciudades, siendo estás concebidas como una unidad donde debían recogerse las actividades principales de la sociedad. Así, encontramos los templos dedicados  a la adoración de dioses mitológicos, concebidos como la “vivienda” de los dioses, el lugar donde habitarían, dejando las ceremonias o cultos al exterior del templo. Consistieron en edificaciones de plantas rectángulares, rodeados de columnas, con cubiertas dos aguas. Espacialmente se distribuían conformando un pórtico o pronaos (espacio de acceso) delimitado por la prolongación de los muros de la cella o naos hasta las pilastras o antas (de donde viene el término in antas); la cella o naos es el espacio central interior donde se aloja la estatua del dios y que puede encontrarse dividida en naves o capillas menores por la ubicación de columnas al interior. Y por último el opistódomos es el espacio situado en la parte posterior del templo donde se guardaban los objetos del culto o tesoros, sin comunicación directa con la naos.

Así, encontramos en el análisis de estas obras que el proceso de diseño, desde sus criterios o partí, su distribución interior que responde a las necesidades del usuario y a es coherente con la época y cultura, es un referente importante para la arquitectura que proyectamos hoy.